CÓDIGO ÉTICO Y DEONTOLÓGICO

 

CÓDIGO ÉTICO COMO PUNTO DE PARTIDA

 

Calidad, herramientas, compromiso y soluciones.

Desarrollar una gestión inmobiliaria de calidad, dar herramientas y soluciones a los clientes que confían en nosotros para comprar o vender propiedades, mediar entre las partes, y además hacerlo de una forma ética y transparente, es nuestra filosofía y nuestro punto de partida.

 

Todo profesional inmobiliario debería tener un Código Ético y Deontológico por el que regirse, exponiendo de forma clara sus principios y su forma de actuar.

 

Estamos orgullosos de trabajar respetando nuestros principios, y de beneficiar con ello a nuestros clientes.

 

Contacta con nosotros cuando quieras vender, comprar, alquilar o gestionar una propiedad en el Bizkaia o en Cantabria oriental. Estamos encantados de asesorar y acompañar a nuestros clientes a lo largo de todo el proceso.

Legalidad

El Consultor conoce y debe hacer cumplir la legislación vigente tanto a nivel local como nacional, y se compromete a asesorar al Cliente en todo momento acerca de dicha legislación.

Especialización

El Consultor está especializado en dar un servicio único, adaptado a cada Cliente y a su situación, ocupándose de la operación desde el primer momento hasta el último.

Capacidad

Cuando la complejidad del caso supere el área de experiencia del Consultor, este recomendará al Cliente requerir el asesoramiento específico adecuado.

Privacidad y Confidencialidad

Por la propia naturaleza delicada de los datos relativos a transacciones inmobiliarias, el Consultor tratará de forma privada y confidencial los datos de las partes, guardando siempre el deber de secreto profesional, de acuerdo a las leyes.

Información veraz

El Consultor asesorará al Cliente del funcionamiento y las particularidades del proceso inmobiliario que quiera llevar a cabo, y lo hará con veracidad, de forma objetiva y sin ocultar información.

Acuerdo de gestión

El Consultor no publicitará ni ofertará propiedades, ni recibirá o consignará cantidades de Interesados sin un acuerdo previo de gestión con el Propietario registral de la propiedad.

Verificación

El Consultor debe encargarse de verificar los datos facilitados por quien encarga la gestión de venta o alquiler de una propiedad, comprobando la titularidad registral, las cargas, gravámenes y servidumbres de la misma, y lo hará antes de ofrecer la propiedad a terceros o comenzar su promoción.

Honorarios

El Consultor debe hablar de forma clara y transparente sobre sus honorarios profesionales, detallando el porcentaje o cantidad de los mismos, quién los abonará y en qué momento del proceso lo hará.

Publicidad objetiva

El Consultor publicitará las propiedades de forma objetiva, evitando la publicidad engañosa y la ocultación de datos que puedan inducir a los interesados a confusión o a error con perjuicio económico.

Cartera limitada

El Consultor dará preferencia a una cartera de Propiedades en exclusiva limitada, con el objeto de hacer un trabajo intenso y dinámico, seleccionando para ello las propiedades con las características más demandadas por sus Clientes, y en un precio adecuado de mercado.

Identificación

El Consultor se identificará mediante DNI ante propietarios y visitas, e igualmente requerirá la identificación de las partes mediante DNI o NIE, respetando la confidencialidad requerida por Ley.

Conflicto de intereses

La experiencia y formación del Consultor deben permitirle salvaguardar los intereses de las partes y los propios sin que estos entren en conflicto, actuando con ética profesional para evitar que alguna de las partes involucradas salga perjudicada. Cuando el Consultor medie entre partes, debe proteger siempre a su Cliente, ofreciendo a la vez un trato justo a todas las partes que intervienen en el proceso.

Competencia

El Consultor procurará una buena relación con sus compañeros de profesión, colaborando con ellos con transparencia y lealtad, y evitando interferir en operaciones exclusivas o ya iniciadas de la otra parte.

Colaboración

Las colaboraciones de cualquier naturaleza nunca podrán suponer una duplicidad de los honorarios cobrados al Cliente ni un aumento de los mismos.

Formación continua

El Consultor tiene el deber y la responsabilidad de seguir formándose continuamente y de conocer las novedades que surgen en el sector, con el objetivo de dar el mejor asesoramiento a sus Clientes.

Deber de información

El Consultor debe informar del presente código a sus Clientes, y tenerlo en todo momento a su disposición.