Dosier de inmueble
Punto de partida
Qué datos incluye un Dosier de inmueble
En pocas palabras

Punto de partida
El Dosier de inmueble debería ser el punto de salida para comercializar cualquier inmueble en venta o en alquiler.
En él hacemos constar toda la información que facilita la posterior identificación de los clientes que responden al perfil de comprador de ese inmueble en concreto, y hace posible ofrecer a los interesados una documentación completa del inmueble, sin dejar nada al azar o a la imaginación, evitando además posteriores dudas o malentendidos.
Disponer de un Dosier de inmueble con información clara y precisa sobre el inmueble, ayuda al propietario a resolver de forma rápida y eficaz las posibles dudas que presenten los compradores interesados.
El objetivo de esta entrada es guiar a quienes quieren realizar un Dosier básico de su inmueble de cara a vender como particular.
Nos centraremos en los dos primeros puntos de un Dosier profesional de inmueble:
– Características del inmueble.
– Beneficios del inmueble.
Anteriormente hemos hablado la Documentación a verificar antes de comprar un bien inmueble; el propietario debería adjuntar esta documentación como anexo a este Dosier.
Qué datos incluye un Dosier de inmueble
Esta es la información que no debe faltar a quien quiere vender (o comprar) un inmueble, sea particular o profesional:
1. Datos generales del inmueble:
– Fecha de construcción.
– Importe de la cuota de comunidad.
– Derramas de comunidad actuales o previstas.
– Importe de cuota del IBI y modo de pago.
– Importe de los recibos de gastos comunes de la vivienda: luz, agua, gas.
2. Datos específicos del inmueble:
– Descripción de la propiedad.
– Descripción de la ubicación de la propiedad.
– Plano de la propiedad.
Memoria de calidades; en ella debe constar la información sobre:
– Tipo de construcción y materiales utilizados.
– Obras, reformas y mejoras acometidas, con fecha.
– Instalación eléctrica.
– Instalación de fontanería.
– Acabados en estructura.
– Acabados en suelos.
– Carpintería.
– Armarios empotrados.
– Ventanas.
– Alicatados.
– Cañerías.
– Puertas.
– Elementos de seguridad.
– Calificación energética.
– Existencia o no de hipoteca.
– Capital total de la hipoteca.
– Capital pendiente de amortizar.
– Cuota a pagar (capital amortizado + intereses).
3. Datos de las zonas y servicios comunes:
– Descripción de las zonas y servicios comunes.
– Ascensores.
– Trasteros.
– Garajes.
– Piscina.
– Zona de juegos.
– Servicio de vigilancia.
– Servicio de limpieza.
– Estatutos de la comunidad.
– Inspección técnica del edificio (fecha, valoración y subsanaciones o acciones previstas).
4. Anexo de Documentación:
– Nota Simple de la propiedad.
– Certificado del Administrador de Fincas (firmado por el Presidente de la Comunidad de Propietarios).
– Justificante de pago del IBI del último año.
– Certificado de eficiencia energética.
– Justificante de pago de suministros básicos: luz, agua, gas.
En pocas palabras
¿Es posible vender un inmueble sin aportar estos datos mínimos del mismo? Sí, e incluso sin conocerlos.
¿Es sensato emprender la compra de un inmueble sin tener estos datos claros? Absolutamente no.
Quien adquiere un inmueble sin conocer los detalles del mismo corre el riesgo de llevarse sorpresas desagradables, y esto es algo que debemos evitar siendo una vivienda uno de los productos más caros que un particular adquiere a lo largo de su vida.